Este fin de semana ha habido un espectáculo al que teníamos ganas de ir. No me gusta hacer publicidad, pero un tipo que llena un teatro él solito para hacerte reir durante hora y media se lo merece. ¿Quién es?
Conforme nos acercábamos al Teatro Gayarre, daba la impresión de que habían sacado a tender toda la ropa, y....
... efectivamente así era.
Indagando en el asunto, se trata de una llamada de atención sobre un festival que se está desarrollando en dicho teatro. Sí que lo consigue, ¿no?
Para hacer tiempo hasta la hora de la función, nos dimos un garbeo, que incluyó desde unas fotos al monumento al encierro
hasta un pincho de tortilla de plástico.
También estuvimos en la Tómbola de Cáritas, que todos los años nos ofrece sus imprescindibles regalos, y que además de la gran labor social que realizan, sobre todo ahora, tanta ilusión nos hacen. (si te toca, claro)
En este caso no hubo suerte, pero habrá que seguir probando.
Hasta pronto
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