Mis arbustos de flores rosas comenzaron a florecer, y eso quiere decir que junio está aquí. El peque practica atletismo y el lunes ganó una medalla de oro en unas pequeñas competiciones del pueblo; vino muy contento porque además habían hecho una pequeña merienda. El martes comencé a hacer un jardín de hadas en una gran maceta que tengo en el jardín. Vi algunas ideas en internet y me emocioné. Se pueden hacer tantísimas cosas, que tengo que centrarme un poco. Se pueden usar materiales naturales, pequeñas plantitas,... (creo que lo hice bien, porque al día siguiente de hacer esa composición, me desapareció el termo del café... Quizás he atraido a un duendecillo al que le gusta el café tanto como a mí). El miércoles compré un pequeño velador por 10 € en una tienda de segunda mano. El jueves fui andando hasta la oficina de correos para mandar un paquete y por el camino cogí unas rosas silvestres en un prado abandonado. El viernes preparé para cenar tortilla de patatas (que es mi especialidad) y "pan amb tumaca"... con una botella de sidra, mmmm.. ese día suelo despertar pensando en la cena. El sábado por la mañana traje un poco de bollería para desayunar y sus caras se iluminaron cuando se levantaron de la cama. Por la tarde vimos una función del coro del peque. El domingo jugamos a cartas después de comer, y a media tarde salimos a dar un paseo y tomar una cerveza. Así transcurrió otra semana más. Van pasando poco a poco, sin hacer ruido, y casi sin darnos cuenta llegará el verano y con él las vacaciones y los días de playa. Es la pequeña alegría que nos impulsa a seguir adelante, poniendo un poco de color en nuestras rutinas diarias.
Os deseo de corazón una feliz semana.
Un abrazo.