Ya de vuelta a la rutina después de esos poquitos días de viaje, lo primero que hice fue acercarme a una tienda de fotos porque mi cámara seguía sin enfocar, y fue un alivio saber que el problema era simplemente un ajuste extraño que por lo visto, yo debí tocar... Así que después de ponerlo todo como antes, salí de allí contenta, ya que mi cabeza ya había empezado a imaginar una avería gorda o difícil de reparar. Es increíble cómo siempre nos ponemos en lo peor, por lo menos yo, y pasamos una temporada angustiados hasta que todo se resuelve (en la mayoría de los casos) sin mayor complicación.
Estos días han sido tranquilos, un día hice lasaña acompañada de la Sra. Fletcher (jajajaj.. me ha dado por ver antiguos episodios), también he estado estudiando para un concurso-oposición que está al caer, podé un poco el jardín, salimos un sábado a comer a un japonés, y poco más. ¡Ah bueno, también hice el cambio de armario, un poco rápido, porque el frío se ha echado encima de repente!
Os mando un abrazo.
Tú te acompañas de la señora Fletcher, y yo de telenovelas antiguas.
ResponderEliminar😁
Hay algo de reconfortante en esos momentos, es como viajar un poco en el tiempo a una época donde quizás éramos más felices.
EliminarACA ESTOY DE REGRESO ESPERO ME RECUERDEN.
ResponderEliminarME ENCANTA JESSICA LOS MIRE TODO S LOS DIAS.
CHAUCITO
¡Bienvenida Alicia, de vez en cuando entraba en tu blog para ver si habías publicado algo! Me alegra que estés de vuelta, cada vez vamos quedando menos, jajajaj....
EliminarYour blog is a virtual sanctuary of knowledge and inspiration for many.
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