Ayer sentí la necesidad de salir de casa temprano, respirar aire fresco y echar a andar a buen ritmo hasta sentir desperezarse el corazón. Aproveché que el peque se va a las 7:25 h. para acompañarle unos metros hasta su parada de autobús. Luego seguí una ruta sin rumbo. No había amanecido del todo y detrás de las persianas bajadas que veía a mi paso, imaginaba gente que acababa de levantarse o que desayunaba en la cocina. Las calles se veían vacías, a excepción de algún vecino que sacaba a su perro a pasear antes de irse al trabajo o algún coche que ponía en marcha el motor. Seguí andando diez, veinte, treinta minutos, y el cielo comenzó a clarear. Di media vuelta y volví a casa. La actividad en las calles era mayor, algunos grupos de adolescentes con caras adormiladas se dirigían al instituto y se notaba un mayor movimiento de coches. Cogí unas flores amarillas, descubrí unos árboles con montones de frutos rojos caídos en el suelo y me fijé en una casa abandonada, algo que me hizo pensar cómo estaría por dentro en este momento. Por la tarde me relajé, preparé la merienda al peque, fui a la biblioteca (encontré un libro que estaba en mi lista, bieeeeeen....), rescaté una fotocopia de un plano de Versalles a finales del XVIII que quiero enmarcar y me preparé un batido de frutas. Entonces, no sé por qué, me di cuenta de que cierta melancolía me había estado invadiendo durante todo el día. Así pues, sentí la necesidad de encontrar un poema que llenase ese pequeño vacío en mi alma. Busqué y busqué en internet, y después de descartar a Neruda, Jiménez y Lorca, me encontré con un delicioso poema de Octavio Paz, titulado "Otoño" con el que me sentí plenamente identificada en ese momento y que dice así:
En llamas, en otoños incendiados,
arde a veces mi corazón,
puro y solo. El viento lo despierta,
toca su centro y lo suspende
en luz que sonríe para nadie:
¡cuánta belleza suelta!
Busco unas manos,
una presencia, un cuerpo,
lo que rompe los muros
y hace nacer las formas embriagadas,
un roce, un son, un giro, un ala apenas;
busco dentro mí,
huesos, violines intocados,
vértebras delicadas y sombrías,
labios que sueñan labios,
manos que sueñan pájaros...
Y algo que no se sabe y dice «nunca»
cae del cielo,
de ti, mi Dios y mi adversario.
Feliz miércoles amigas.
Has transmitido con mucho acierto tu estado de animo , desde la melancolía surge mucha creatividad y tu escrito lo plasma bien , el poema como tu bien dices delicioso... gracias por compartirlo. Un besote.
ResponderEliminarMe alegro de que te haya gustado. Feliz fin de semana :D
EliminarQue bonita entrada, me haces meterme en el papel, parece que era yo la que estaba andando por esas calles desiertas.....bonito poema mil besos Avelina
ResponderEliminarse me olvidaba me encanta ver siempre ese trocito de chocolate en tus meriendas,¡ si es que somos iguales!, yo también lo suelo hacer, je je
EliminarJajajaj.. bueno, el chocolate es para el peque, aunque de vez en cuando también cojo algún trozo aunque no me apasiona demasiado. :)))
EliminarEl viento se despierta constantemente en tu blog.
ResponderEliminarUn beso.
Saludos desde mi Aire.
Feliz semana, amiga.
Gracias tocaya, feliz fin de semana. :)
EliminarHow beautiful. You capture the season perfectly in your poem. Thank you for sharing.
ResponderEliminarThank you Jennifer, you are very nice!!!
EliminarQUE LINDO!!!
ResponderEliminarSI EL OTOÑO ES ASI DE TRISTON Y LOS COLORES EMPIEZAN LLENANDO LA VISTA PERO APRETANDO EL CORAZON.
ES NORMAL EN ESTA EPOCA.
SALUDITOS
Más vale que la melancolía suele durarme poco, justo lo necesario. Un beso
EliminarWhat a beautiful post! That early morning walk sounds magical. x
ResponderEliminarThanks for your nice comment...!!! :D
EliminarOhhh que día tan fructífero amiga!!!!
ResponderEliminarTa bien detallado, con tanta sensibilidad; me he sumergido contigo. Y al llegar al POEMA, ya ha sido el summum, notas de CIELO han tocado mi ALMA....
UN AGRADABLE DÍA PARA TI Y PARA TOD@S QUERIDA :)))
Dicen que el que busca encuentra, y eso me ocurrió a mí. No soy muy de poesías, pero ese día necesitaba algo más profundo y ese poema me encantó. Quizás deba leer algo más de ese autor. Feliz fin de semana :))
EliminarQue fotos mas bonitas y cuanto transmiten! El otoño nos habla a cada paso, solo nos queda disfrutar de el!
ResponderEliminarSaludos!
Nika
Gracias Vero, ojalá el otoño nos traiga emociones y mucha creatividad. Un beso
Eliminarque bonita entrada, me encanta! Me encanta el otoño pero reconozco que siempre trae consigo algo de melancolía, un beso!
ResponderEliminarBueno, en esta vida necesitamos un poco de cada, si no esto sería terriblemente aburrido. Un abrazo Pepa
EliminarA wonderful poem and a lovely welcome to fall.
ResponderEliminarHappy weekend dear friend!
Olympia
Me ha encantado esta entrada, SopaAzul, muy especialmente. Tus fotos llenas de poesìa, igual que tu melancolìa describiendo las sensaciones de una mañana cualquiera y para terminar, esos versos de O.Paz que hacen estremecer...
ResponderEliminarUn beso grande